Desde este enfoque la atención psicológica consiste en realizar un programa personalizado aplicando técnicas y estrategias para IDENTIFICAR, DIAGNOSTICAR y PLANTEAR UN TRATATAMIENTO adecuado a cada caso.

        El papel del paciente en ACTIVO: es habitual pedirle que realice tareas fuera de la sesión de consulta que serán útiles para conseguir los cambios deseados (serán acordadas con el).

        Se ofrece atención, orientación, diagnóstico y tratamiento a nivel personalizado, evaluando desde la primera consulta hasta el final de la terapia todas las particularidades personales del paciente.

        El primer paso es hacer una EVALUACIÓN del caso conociendo en profundidad qué ha llevado a la persona a acudir a consulta, qué objetivos persigue y qué causas están produciendo y manteniendo el malestar.

       Tomando la evaluación como base establecemos UN DIAGNÓSTICO CLÍNICO, formulando hipótesis explicativas y trazamos objetivos del tratamiento.

        El siguiente paso es la INTERVENCIÓN, el empleo de tecnicas terapeuticas orientadas al logro de los objetivos planteados.

        Y el último paso sera el SEGUIMIENTO, donde se evaluaría la aplicación y realización de ajustes necesarios para el mantenimiento de los cambios.